Símbolos taoístas
Los símbolos taoístas son parte de una filosofía espiritual que se apoya en la naturaleza, en la esencia de la naturaleza, sus transformación, sus cambios, sus movimientos. El artista taoísta busca reflejar, a través del arte, un mundo interno que experimente la totalidad.
Antonio García Calvente, como acupuntor, practicante durante más de 20 años de Chi Kung y Tai Chi, y meditante, dió un sentido personal y abstracto a las claves de la estética del arte taoísta.
En el arte de la colección taoísta, encontraremos varios símbolos taoístas.
- El ARBOL como un símbolo esencial tanto del taoísmo, como del desarrollo de la estética del arte taoísta.
- Nos encontramos símbolos como el CIRCULO, TRIÁNGULO, CUADRADO y la CRUZ, como los movimientos esenciales del Tao y su manifestación.
- El PEZ y el PÁJARO, símbolos que surgen del estudio de Chuang Tsu y el pez K’UN, el pez más pequeño y el más grande a la vez, que se transforma en el ave más pequeña y más grande a la vez.
- ESPIRAL, símbolo de la manifestación, el movimiento, el cambio, la expansión y contracción del Tao.
- El CARACOL, símbolo del iniciado, aquel que lleva la casa a cuestas y camina por la vida, rindiéndose a su destino, sin luchar contra él.
Ate taoísta
El arte taoísta se apoya en la mirada a lo eterno.
Ensō significa círculo en japonés. Aunque es un concepto Zen, tiene su origen en el taoísmo de China.
Simboliza lo eterno, el estado de la mente búdica y despierta, la mente iluminada que en los humanos se manifiesta en el momento en que el cuerpo y el espíritu están al servicio del poder creativo.
Es la vacuidad manifestando a través de la gran fuerza activa.
Es la esencia pura, el silencio del que surge toda manifestación.
El Símbolo del Pez
«En el mar del septentrión vive un pez. Se llama K’un, es inmenso; mide no sé cuántos miles de millas. Este pez se transforma en ave y se llama P,eng. Sus espaldas miden no sé cuántos milesde millas. Raudo es su vuelo.»
Esparcimiento, Capítulo 1, Libro primero (Interioridades) de Chuang Tzu
El pez es uno de los aspectos del Ying Yang. Es el símbolo de la dualidad de todo cuanto existe en el Universo, las fuerzas fundamentales, opuestas y complementarias, que se encuentran en todas las cosas que nacen del cielo y la tierra.
El pez, cuando mira hacia arriba lo ve todo azul, cuando mira hacia abajo lo ve todo azul. Por eso vive justo en el centro, es el centro donde se unen todas las cosas, el corazón.
El símbolo del árbol
El árbol es el crecimiento, la expansión. Es la manifestación desde la esencia.
Son nuestras raíces y todos los procesos individuales y colectivos por alcanzar la totalidad.
Son los caminos que generamos, pero también los caminos que nos preceden.
Es el punto central y el eje del mundo, cuyas raíces y ramas nos conectan con la tierra y el cielo, con el origen y el todo.